Las tecnologías de medios digitales actuales están expandiendo las opciones para que los terapeutas de arte se conecten con los clientes, incluido el uso de la telehealth. A diferencia de los medios tradicionales, las interfaces de medios de arte digitales permiten una gama de expresión que incluye la escultura y el dibujo en dos y tres dimensiones. Los participantes pueden editar o cambiar fácilmente formas y contenido, creando imágenes que no existen o no pueden existir en la vida real.
Estas tecnologías pueden presentar desafíos porque solo involucran nuestros sentidos visuales y auditivos y carecen de los aspectos táctiles de la creación de arte tradicional. Pero proporcionan una manera de mantener la conexión terapéutica al facilitar la expresión creativa y la comunicación a través de una interfaz digital, especialmente para clientes que pueden estar dispuestos o incapaces de trabajar con materiales de arte físicos.
Para llevar la experiencia digital bidimensional a tres dimensiones y acercarla a nuestra experiencia vivida del mundo que nos rodea, mis colegas y yo hemos estado explorando el potencial de la realidad virtual, tanto para expandir nuestras nociones de lo que es posible como para fomentar el movimiento y la inmersión en la expresión artística digital.
En estudios realizados en colaboración con el International Arts + Mind Lab de la Universidad Johns Hopkins y el profesor de ingeniería biomédica de Drexel, Hasan Ayaz, medimos la actividad cerebral con espectroscopía cercana al infrarrojo funcional (fNIRS) en adultos mientras participaban en experiencias de terapia de arte en realidad virtual.
Los datos de los escáneres cerebrales y las respuestas autoinformadas de los participantes indican que medios novedosos como la realidad virtual pueden promover la expresión creativa y la actividad física, al mismo tiempo que descomponen los temores entre muchos participantes de que no son buenos creando arte.
La gente parece no asociar los mismos estigmas y temores con crear en realidad virtual como en los medios de arte tradicionales. Esto, a su vez, ayuda a los participantes a involucrarse en la autoexpresión que de otro modo podrían no haber tenido la confianza para explorar.
La realidad virtual proporciona un universo alternativo donde los participantes pueden moverse a través de objetos, crear estructuras que desafían la gravedad y entrar y salir de sus creaciones. Después de crear en tal espacio, la gente a menudo se siente energizada con un sentido de posibilidad creativa que anteriormente no habían imaginado.
Aunque intangibles, estas experiencias digitales pueden ayudar a las personas a apreciar el mundo físico de nuevas maneras, y tecnologías como la impresión 3D podrían ayudarnos pronto a hacer algunas experiencias creativas digitales más táctiles. Como resultado, la terapia de arte en realidad virtual podría ser útil para pacientes con lesiones debilitantes y aquellos que se sienten psicológicamente estancados en sus patrones de vida.
En el último medio siglo, la terapia de arte ha evolucionado desde ser una herramienta para abordar las necesidades insatisfechas de individuos que enfrentan adversidades y traumas, hacia un uso mucho más amplio en hospitales, escuelas y organizaciones comunitarias para promover la salud y el bienestar a través de la autoexpresión artística. En el futuro, se prevé que la definición de terapia se expanda más allá de la terapia verbal sola, y la terapia de arte será reconocida como una opción de tratamiento psicosocial rentable y sostenible.
La telemedicina también ayudará a los terapeutas de arte a alcanzar audiencias previamente inaccesibles en ubicaciones remotas. A medida que nos conectamos con comunidades en todo el mundo, donde prácticas tradicionales o indígenas distintas permanecen intactas, necesitaremos ser conscientes y respetar las prácticas culturales existentes. Pero también esperamos aprender cómo las prácticas tradicionales ya integran la creatividad para apoyar la salud mental y el bienestar. Tales percepciones podrían ofrecer una comprensión más profunda sobre cómo la creación artística puede sanar y conducir a nuevas herramientas para ayudar a otros.